Adalberto Lugea

Como unionistas podemos decir con orgullo, que el "Negro", como se lo conocía, nació prácticamente bajo nuestro techo.
No se había fundado aún la Federación Marplatense de Patín. cuando ya él se había puesto la celeste y blanca y era asiduo participante y ganador en las carreras que por entonces se llevaban a cabo en circuitos callejeros, con preferencia en los barrios de la ciudad, cuando el patín era un deporte "raro".

TRAYECTORIA
El nombre de Lugea comenzó a cobrar notoriedad en 1947, año en el cual el Club Unión formó su primer equipo.
En abril, de ese año, Adalberto batió el récord mundial de permanencia en nuestro gimnasio, en el mismo lugar donde hoy cientos de chicos practican basquetbol.
A partir de allí eslabonó una serie realmente impresionante de triunfos, especialmente en pruebas de largo aliento, participando en carreras como la Doble Miramar (90 kilómetros)y la Doble Otamendi, entre otras.
También logró el galardón de campeón argentino, cuando los certámenes se llevaban a cabo en el circuito de la costanera de la Capital Federal.
Una vez retirado de la práctica del patín, siguió como entrenador. Varias veces fue director técnico de la selección argentina y bajo su tutela Raúl Scafati (quien también supo representar a Unión) se consagró campeón mundial.
Con toda una vida de éxitos dedicada de lleno al patín no es de extrañar que el Patinodromo Municipal lleve su nombre.
No exageramos si decimos que PATIN Y LUGEA es un auténtico sinónimo.


Patinodromo "Adalberto Lugea"


50 horas sin parar!!!!

El día 7 de Abril de 1947, en nuestra sede de 9 de Julio 3749, iniciaba el intento de superar la marca de permanencia sobre patines.
Como control estaba el Profesor Don Justo Ernesto Román y el periodista deportivo Don Horacio Gaudini, del diario La Capital y por entonces títular de la recordada audición de LU6, "La hora del deporte".
Fueron pasando las horas y los premios llegaban ininterrumpidamente para el "Negro", se reconocía su esfuerzo con trofeos o hasta con vales para cortarse el pelo durante un año!!! Mientras él seguía patinando.
Cuando se fue acercando la marca buscada, una multitud fue rodeando la sede, a tal extremo que la policía montada debía controlar a los aficionados cien metros antes de nuestra casa. Cuando Lugea llegó a las 50 horas y 25 minutos sin pausas, una ovación coronó su faena y el haber logrado la marca mundial.
El problema que surgió después de la hazaña era llevarlo a Lugea (extenuado y entredormido) hasta su domicilio para un reparador descanso sin sufrir las consecuencias del cariño de las más de mil personas que se daban sita en la calle 9 de Julio. Fue entonces cuando surgió la idea salvadora, se dijo por los altavoces que si alguién tocaba a Adalberto en su salida, quedaba descalificado y el récord no sería homologado. De tal forma nadie lo tocó y pudo ser trasaladado sin incovenientes.
Tras él quedó la hazaña, que fue comentario obligado en nuestra ciudad durante muchos días.

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1 comentarios:

  1. carlos Says: Este comentario ha sido eliminado por el autor.